¿Sé decir “gracias”?

Habla el Papa01/10/2024

El Evangelio nos presenta una parábola dramática con un final triste. Jesús nos recuerda lo que sucede cuando el hombre se cree que se hace a sí mismo y olvida la gratitud. (cfr Mt 21, 33-43)

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La corrección fraterna

Habla el Papa04/09/2024

El Evangelio nos habla de la corrección fraterna, que es una de las expresiones más grandes del amor, y también una de las que requieren un mayor esfuerzo. (cfr Mt 18, 15-20)

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Escritor

La fuerza de la semilla

Habla el Papa01/07/2024

El Evangelio nos presenta la parábola del sembrador. La de la “siembra” es una imagen muy hermosa, y Jesús la usa para describir el don de su Palabra. (cfr Mt 13,1-23)

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No tengáis miedo

Habla el Papa01/06/2024

No hay que tener tanto miedo a sufrir incomprensiones y críticas, a perder prestigio y ventajas económicas por permanecer fieles al Evangelio, sino a desperdiciar la existencia buscando cosas de poco valor, que no colman el sentido de la vida.

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El perdón y la fuerza

Habla el Papa29/04/2024

El Evangelio del sexto domingo de Pascua, nos habla del Espíritu Santo, que Jesús llama Paráclito. Paráclito es una palabra que proviene del griego, y que significa al mismo tiempo el que consuela y abogado. (cfr. Jn 14,15-17)

 

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Jesús expulsa a los mercaderes del templo

Habla el Papa02/04/2024

Detengámonos un poco en el contraste entre casa y mercado: se trata, efectivamente, de dos modos distintos de presentarse ante el Señor

El Evangelio nos muestra una escena dura: Jesús expulsa a los mercaderes del templo (cfr. Jn 2,13-25). Jesús que echa a los vendedores, derriba las mesas de los cambistas y amonesta a todos diciendo: «No hagan de la casa de mi Padre un mercado » (v. 16). Detengámonos un poco en el contraste entre casa y mercado: se trata, efectivamente, de dos modos distintos de presentarse ante el Señor.

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Librarnos de las “cadenas” que sofocan nuestra libertad

Habla el Papa19/02/2024

El Evangelio de San Marcos nos relata un episodio en el que Jesús libra a una persona poseída por un “espíritu maligno”. El diablo quiere encadenar nuestras almas, nos quita la libertad, siempre. (cf. Mc 1,21-28)

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