Juan Marcos, él siempre utilizaba su nombre en hebreo “Juan” y su nombre romano “Marcos”; lo más probable es que actuara de intérprete de San Pedro, ya que éste no tenía muchos conocimientos del griego. Marcos acompañó en su primer viaje misional a Pablo, cuando se desplazaron a Chipre. En sus primeros documentos antiguos, San Marcos recibe el epíteto “Kolobodáktylos” que significa “hombre de los dedos mutilados o cortos”.
No se sabe nada de su vida durante diez años, hasta que Marcos se encuentra en Roma en el año 64 y ayudó a San Pablo cuando lo encarcelaron. Cuando San Pablo fue liberado de la cárcel, Marcos regresó a Oriente.
San Pablo al ser encarcelado por segunda vez, ruega a Timoteo que ayude a Marcos para que pueda regresar a Roma, en ese momento se presume que se encontraba en Éfeso. Ésta podemos decir que es la última información histórica de San Marcos, cuando rondaba el año 66.
Algunas leyendas dicen que San Marcos al final de su vida, fundó la primera Iglesia en Alejandría, siendo su primer Obispo. San Marcos es venerado en el bajo Egipto, Alejandría y en Venecia, que llegó a llamarse y conocerse como “La Republica de San Marcos”.
