Usted está aquí

Por sus frutos los conoceréis

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: 
- Cuidado con los falsos profetas; se acercan con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces. 
Por sus frutos los conoceréis. A ver, ¿acaso se cosechan uvas de las zarzas o higos de los cardos? Los árboles sanos dan frutos buenos; los árboles dañados dan frutos malos. Un árbol sano no puede dar frutos malos, ni un árbol dañado dar frutos buenos. El árbol que no da fruto bueno se tala y se echa al fuego. Es decir, que por sus frutos los conoceréis.