Usted está aquí

Perdonad, y seréis perdonados

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: 
- Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. 
La medida que uséis, la usarán con vosotros.

Comentario del Papa Francisco

La sabiduría de acusarme a mí mismo… Acusarme a sí mismo es el primer paso. Voy por la calle, paso delante de la cárcel: “Eh, estos se lo merecen”, Pero ¿sabes que si no fuera por la gracia de Dios tú estarías allí? ¿Has pensado que tú eres capaz de hace las cosas que ellos han hecho, y aún peores todavía? Esto es acusarse a sí mismo, no esconderse a sí mismo las raíces del pecado que están en nosotros, las muchas cosas que somos capaces de hacer, también si no se ven. Que el Señor, en esta Cuaresma, nos dé la gracia de aprender a acusarnos: Ten piedad de mí, Señor, ayúdame a avergonzarme y dame misericordia, así yo podré ser misericordioso con los otros.