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El bautismo de Juan ¿de dónde venía?

En aquel tiempo, Jesús llegó al templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo para preguntarle: 
- ¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad? 
Jesús les replicó: 
- Os voy a hacer yo también una pregunta; si me la contestáis, os diré yo también con qué autoridad hago esto. El bautismo de Juan ¿de dónde venía, del cielo o de los hombres? 
Ellos se pusieron a deliberar: 
- Si decimos «del cielo», nos dirá: «¿Por qué no le habéis creído?». Si le decimos «de los hombres», tememos a la gente; porque todos tienen a Juan por profeta. 
Y respondieron a Jesús: 
- No sabemos. 
Él, por su parte, les dijo: 
- Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto.

Comentario Papa Francisco

La historia de Mexíco no puede entenderse sin los valores cristianos que sustentan el espíritu de su pueblo. No es ajena a esto Santa María de Guadalupe, Patrona de toda América, que en más de una oportunidad, con ternura de Madre, ha contribuido a la reconciliación y a la liberación integral del pueblo mexicano, no con la espada y a la fuerza, sino con el amor y la fe. Ya desde el principio, la “Madre del verdaderisimo Dios por quien se vive” pidio a san Juan Diego que le construyera “una Casita” en la que pudiera acoger maternalmente tanto a los que “estan cerca” como a los que “estaán lejos”. Allí encuentran la fuerza de Dios para sobrellevar los sufrimientos de la vida. Como a san Juan Diego, María les da la gracia de su consuelo maternal y les dice al oído: “No se turbe tur corazón. ¿No estoy yo aquí, que soy tu Madre?”.