El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a mostrarse provida. Trump reiteró su llamada a prohibir el aborto tardío, señalando el ejemplo vivo y sonriente de una niña presente por invitación suya, y que podría haber sido asesinada legalmente si su madre hubiera tomado una «elección» diferente.
«Mientras oramos por todos los enfermos, sabemos que Estados Unidos está constantemente logrando nuevos avances médicos. En 2017, los médicos del hospital St. Luke's en Kansas City dieron a luz a la bebé más prematura que ha logrado sobrevivir», dijo el presidente, haciendo referencia a dos de sus invitados especiales que asistieron .
«Nacida con solo 21 semanas y seis días y con un peso de menos de una libra, Ellie Schneider era una luchadora nata. Gracias a la habilidad de sus médicos y las oraciones de sus padres, la pequeña Ellie siguió ganando la batalla de la vida. Hoy Ellie es una niña fuerte y saludable de dos años, sentada con su increíble madre Robin en la galería. Ellie y Robin, nos alegra teneros con nosotros esta noche».
«Ellie nos recuerda que cada niño es un milagro de la vida, y gracias a las maravillas médicas modernas, el 50 por ciento de los bebés muy prematuros que nacen en el hospital donde nació Ellie ahora sobreviven», continuó Trump. «Nuestro objetivo debe ser asegurar que cada bebé tenga la mejor oportunidad de prosperar y crecer como Ellie. Es por eso que le pido al Congreso que proporcione $ 50 millones adicionales para financiar la investigación neonatal para los pacientes más jóvenes de Estados Unidos».
«Es por eso que también pido a los miembros del Congreso aquí esta noche que aprueben una legislación que finalmente prohíba el aborto tardío de bebés», declaró Trump: «Ya sea que seamos republicanos, demócratas o independientes, seguramente todos debemos estar de acuerdo en que cada vida humana es un regalo sagrado de Dios».
La Ley de protección del niño por nacer con capacidad para el dolor, que prohibiría los abortos a partir de las 20 semanas, requeriría que los republicanos recuperen la mayoría en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos en noviembre y que además obtengan una mayoría cualificada (60 votos) en el Senado o modifiquen las reglas actuales para aprobar ese tipo de leyes federales.
