Un cachorro adoptado recientemente, de nombre Pastis, se adaptó muy bien a la vida de la Parroquia en Amiens.
El sacerdote Cédric Lafontaine, de la Comunidad San Martin que sirve actualmente en la diócesis de Amiens, en Francia, adoptó recientemente a un joven Nova Scotia retriever de nombre Pastis, que ya ha adquirido algo de formación de base, como saber esperar a que acabe la bendición de los alimentos antes de abalanzarse sobre su plato de comida.
Según el sacerdote, que junta las manos y canta la oración antes de la comida, las “lecciones de catecismo” del cachorrito empezaron con el pie derecho.
Parece que San Francisco no es el único en saber cómo hablarle a los animales...