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Llueven los millones para financiar el aborto

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La creación de este fondo internacional responde a la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de prohibir las subvenciones a organizaciones que practiquen o promuevan el aborto en el extranjero. La prohibición del gobierno estadounidense supondrá una pérdida de 600 millones de dólares en la financiación de estas organizaciones.

La iniciativa “She decides” busca contrarrestar las medidas provida de la administración Trump y ya cuenta con 181 millones de euros para financiar y promover el aborto a nivel internacional, especialmente en los países en vías de desarrollo.

Durante la rueda de prensa previa a la conferencia, ministros de Holanda, Bélgica, Dinamarca y Suecia anunciaron que sus gobiernos destinarán 51 millones de euros a este fondo internacional para financiar el aborto.

La ministra holandesa de Cooperación, Lilianne Ploumen, ha asegurado que su objetivo es llenar el “agujero” que ha causado Estados Unidos en la financiación del “aborto seguro”. Según explica la ministra holandesa, los primeros en responder fueron los gobiernos de Bélgica, Dinamarca y Suecia y después, países como Finlandia y Luxemburgo.

La invitación del Parlamento Europeo a financiar el aborto

El pasado 14 de febrero, el Parlamento Europeo se opuso a la decisión del presidente de Estados Unidos de restablecer la llamada “política de Ciudad de México” que prohíbe que las organizaciones internacionales que promueven el aborto reciban fondos federales de Estados Unidos.

El texto aprobado por el Parlamento Europeo calificaba la medida provida del presidente de Estados Unidos de “regla mordaza” y de “ataque directo” a los derechos de las mujeres.

Con carácter de urgencia, la Eurocámara solicitaba a la Unión y a sus Estados miembros contrarrestar el impacto del restablecimiento de “la política de Ciudad de México” y aumentar “significativamente” la financiación de los llamados “derechos sexuales y reproductivos”.

Con este objetivo, el Parlamento Europeo proponía establecer un fondo internacional para financiar el acceso al control de la natalidad y al aborto, y recurrir para este fin tanto a la financiación nacional como a los fondos para el desarrollo de la Unión.