Usted está aquí

La Iglesia en Alemania está en manos de quienes quieren cambiar la fe católica

La Iglesia en Alemania está en manos de quienes quieren cambiar la fe católica

Los obispos de Alemania alientan un polémico programa con la creación de una “asamblea sinodal” en cooperación con el Comité Central de Católicos Alemanes (ZdK, por sus siglas en alemán), una organización que en febrero de este año solicitó el cambio de la moral sexual de la Iglesia.

Esta decisión de los obispos se dio pese a la carta que el Papa Francisco escribió en junio dirigida al pueblo de Dios en Alemania en la que solicitó que los católicos del país caminen de la mano con toda la Iglesia.

En marzo de este año, el Cardenal Reinhard Marx, presidente del Episcopado alemán, anunció el inicio de un “proceso sinodal” para debatir algunos “temas esenciales” relacionados a los abusos sexuales en la Iglesia: el celibato sacerdotal, la enseñanza moral de la Iglesia y la reducción del poder clerical.

Por esa razón, en agosto y durante la asamblea de los obispos alemanes, se presentó el borrador de los estatutos de este proceso en el que se plantea la formación de una “asamblea sinodal” para revisar estos temas.

Fuentes cercanas al liderazgo católico alemán indicaron a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– que el proceso sinodal ya está en marcha con “absoluta certeza”.

CNA ha obtenido una copia del borrador de los estatutos.

En el texto se señala que el proceso sinodal permitirá “revisar y clarificar temas esenciales como la autoridad y la separación de poderes, la moral sexual, el modo de vida sacerdotal y el tema de las mujeres que sirven en puestos eclesiásticos” por un periodo de dos años.

El borrador también señala que la “asamblea sinodal” creada para este fin tendrá la autoridad de aprobar resoluciones a nombre de la Iglesia en Alemania. Esta asamblea estará conformada hasta por 200 miembros. De estos, 70 serán del ZdK.

En febrero de este año dos de sus líderes firmaron una carta pública dirigida al Cardenal Marx, en la que solicitaban junto a otros siete líderes católicos incluidos algunos sacerdotes, una nueva estructura eclesial basada en la “separación de poderes”, la ordenación sacerdotal de mujeres, el fin de celibato obligatorio y una “razonable y justa evaluación de la homosexualidad”.

De acuerdo al texto, en la asamblea sinodal participarían los 69 obispos de la conferencia episcopal. El resto de miembros serán sacerdotes, diáconos, agentes pastorales, trabajadores y miembros de otros grupos laicos; con lo cual los obispos participarán como una minoría.

Cada miembro tendrá derecho a un voto y para aprobar las resoluciones se necesitará una mayoría de dos tercios, alrededor de 134 votos, en los deberán estar incluidos dos tercios de los votos de los obispos.

El artículo 11 del borrador de los estatutos señala que “la resoluciones que tengan que ver con asuntos reservados al control de la Iglesia universal serán transmitidos a la Sede Apostólica”.

En su carta enviada a Alemania el 29 de junio, Solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Papa Francisco expresó su “preocupación con respecto al futuro de la Iglesia en Alemania”, alertó sobre el “decaimiento de la fe” y animó a no asumir la situación actual con “pasividad o resignación”. También exhortó a intensificar “la oración, la penitencia y la adoración”.

Además, el Santo Padre destacó la necesidad de “recuperar el primado de la evangelización” y “tomar contacto con aquello que en nosotros y en nuestras comunidades está necrosado y necesita ser evangelizado y visitado por el Señor. Y esto requiere coraje, porque lo que necesitamos es mucho más que un cambio estructural, organizativo o funcional”.

A pesar del llamado del Papa, fuentes importantes del Episcopado alemán dijeron a CNA que los obispos están en la etapa final para completar el documento para el proceso y la asamblea sinodal.

La asamblea sinodal estará presidida por el Cardenal Marx y por el Dr. Thomas Sternberg, presidente del ZdK. Además, cada área de trabajo será analizada por un grupo más pequeño llamado “foro sinodal”, cuyos miembros son determinados por el Purpurado y el líder laico.

Ambos han confirmado en el sitio web de ZdK el pasado 5 de julio, solo seis días después de recibir la carta del Papa Francisco, que los foros ya han empezado sus trabajos.

Se espera que estos foros tengan listos algunos reportes durante la realización del Sínodo de la Amazonía en octubre en el Vaticano, un evento en el que algunos miembros de la jerarquía de Alemania han mostrado gran interés así como un influyente papel para la redacción del Instrumentum laboris o documento de trabajo.

Aunque el Papa Francisco ya ha señalado que la ordenación sacerdotal de viri probati, ancianos casados de probada virtud, no será un tema principal en el Sínodo, varios obispos alemanes se han manifestado a favor de esta medida.

En una entrevista en 2018, el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Mons. Franz-Josef Bode, dijo que si se autoriza la ordenación de sacerdotes casados en la Amazonía, entonces los obispos alemanes insistirían para tener ese mismo permiso.

El Prelado dijo que “la emergencia pastoral” en Osnabrück, su diócesis, y otras jurisdicciones alemanas, “es distinta pero muy severa también”.

Asimismo, Mons. Franz-Josef Overbeck, Obispo de Essen y presidente de Adveniat, institución de ayuda de la Iglesia en Alemania para América Latina, dijo que el Sínodo de la Amazonía “es un punto de no retorno” para la Iglesia y que “nada será lo mismo” después de este encuentro.

El Prelado también ha apoyado públicamente la “huelga de mujeres” contra la Iglesia en Alemania, convocada por un grupo de católicas tras el no del Papa Francisco a la ordenación de diaconisas.

CNA conversó con diversos funcionarios del Vaticano y estos señalaron que los estatutos de la asamblea sinodal de Alemania aún no se han enviado a las autoridades eclesiales en Roma para su consulta o aprobación.

El Cardenal Rainer Maria Woelki, Arzobispo de Colonia, dijo el 4 de septiembre en el diario de su arquidiócesis que está preocupado por este proceso sinodal ya que, como está concebido, puede generar una fractura entre la Iglesia universal y la jerarquía en Alemania.

Muchos católicos, señaló, “temen que incluso estemos arriesgando la comunidad con la Iglesia universal para convertirnos en una Iglesia nacional alemana”.

La grave crisis de la Iglesia en Alemania

En el marco del Sínodo de los Obispos para la Amazonía que se celebrará en octubre, algunos obispos alemanes asistieron a fines de junio a una reunión privada en Roma, entre los que estaban el Cardenal Walter Kasper, que promueve públicamente el acceso a la Eucaristía de los divorciados en nueva unión.

En la reunión estuvo también Mons. Overbeck.

A mediados de julio de este año la Conferencia Episcopal de Alemania dio a conocer algunas estadísticas del año 2018, entre las que destaca que en el periodo fueron más de 216 mil fieles los que decidieron abandonar la Iglesia Católica.

Asimismo, de los 23 millones de bautizados en el país, de una población total de 83 millones, el porcentaje de los que asisten a la Misa dominical está en un 9.3%, es decir alrededor de 2,1 millones.

Estas cifras confirman los pronósticos de mayo de 2019 según los cuales el número de cristianos en Alemania se reducirá a la mitad en el año 2060, como informó CNA Deutsch, agencia en alemán del Grupo ACI.

En el caso de los sacerdotes que sirven en las diócesis del país, actualmente el número ha descendido a 1.161 en 2018, cuando eran más de 17 mil en el año 2000.

Las estadísticas también señalan que en el año 2000 las parroquias en Alemania eran 13.241. En 2018 descendieron a 10.045.

En un comunicado publicado el viernes 19 de julio, el P. Hans Langendörfer SJ, dijo que los números son “preocupantes” pero, en su opinión, hacen parte de “los procesos de cambio”.

“Lamentamos cuando las personas se van de la Iglesia Católica. Entendemos que haya surgido la desconfianza o si se ha perdido la confianza y la credibilidad”, dijo el sacerdote.

Las estadísticas de 2018 no proporcionan ninguna información sobre el sacramento de la Reconciliación o Confesión, una práctica que parece haber sido abandonada casi por completo por los católicos del país, incluidos los sacerdotes.

En 2018, la Conferencia Episcopal Alemana elaboró un documento que proponía algunas condiciones para dar la Comunión Eucarística a los protestantes casados con católicos.

Siete obispos bávaros, entre ellos el Arzobispo de Colonia, Cardenal Rainer Maria Woelki, se opusieron a la propuesta.