En 2018 lanzaron una Alianza para personas sin techo. Se propusieron dar una casa a 10.000 personas sin techo antes del año 2023. Y las cosas van mucho mejor de lo que se esperaban.
MARK MCGREEVY
Alianza Famvin con las personas sin hogar
“Todo apunta a que habremos dado una casa a 10.000 personas ya a finales de 2021. Y luego como quedan otros dos años y veremos qué cosas adicionales podemos hacer... Hemos aprendido lo importante que puede ser la labor de la Iglesia para desarrollar este tipo de proyectos cuando se juntan en un equipo las personas adecuadas y con un mismo foco. Es maravilloso y muestra que nuestra Iglesia puede hacer grandes cosas”.
La iniciativa se llama “13 Casas” y se inspira en el fundador de los Vicencianos, San Vicente de Paúl, que encabezó un proyecto similar para ayudar a niños sin hogar de París en 1643.
MARK MCGREEVY
Alianza Famvin con las personas sin hogar
“Ese año falleció el rey Luis XIII de Francia y dejó en su testamento a Vicente lo que en la actualidad equivaldría a 1 millón de dólares. El futuro santo lo utilizó para comprar 13 casas, que se convirtieron en el primer gran proyecto casi exploratorio para ver cómo se podía alojar a niños sin techo y reintegrarlos en la sociedad”.
La campaña es “un esfuerzo verdaderamente global de una Iglesia verdaderamente global”. Estas personas de México que lo perdieron todo durante el terremoto de 2017 pueden dar fe de ello. Gracias a “13 Casas”, sus hogares y su parroquia fueron reconstruidas.
Este espíritu de solidaridad vicenciana se puede sentir también en muchos otros países como Nigeria, Madagascar o Perú.
MARK MCGREEVY
Alianza Famvin con las personas sin hogar
“Ya sea una familia en Filipinas que ha sufrido un tifón, ya sea otra catástrofe natural en otra parte del mundo; inundaciones en América Latina... En todos esos casos, hemos podido intervenir y ayudar a las familias a levantarse y tener un lugar al que llamar hogar”.
La Familia Vicenciana no se detiene en lo básico. Una parte de su misión es abordar lo que provoca que haya personas sin techo, y cambiar los prejuicios que hay contra estas personas.
Así, lo que comenzó como una iniciativa local con 13 casas en 1643, en 2021 es ya una labor global en al menos 41 países, impulsada por más de dos millones de miembros de la extensa y caritativa Familia Vicenciana.
Traducción: Daniel Díaz Vizzi
