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Santa Teresa de Jesús. Doctora de la Iglesia - 15 de Octubre

Santa Teresa de Jesús. Doctora de la Iglesia

15 DE OCTUBRE - Conocida como Santa Teresa de Ávila. “Teresa de Jesús” es el nombre de religión adoptado por Teresa de Cepeda y Ahumada, hija de Alonso Sánchez de Cepeda. Su vida y su evolución espiritual podemos seguirlas a través de sus obras de carácter autobiográfico, entre las que figuran: La vida (escrito entre 1562 y 1565), las Relaciones espirituales, el Libro de las fundaciones (iniciado en 1573 y publicado en 1610) y sus cerca de quinientas Cartas.

“La Vida” abarca desde su infancia hasta la fundación del primer convento reformado de San José de Ávila, en 1562. Gracias a ella se sabe de su afición por los libros de caballerías y de vidas de santos. En 1531, su padre la internó como pupila en el convento de monjas agustinas de Santa María de Gracia, al año siguiente, tuvo que volver a su casa aquejada de una grave enfermedad. Quería tomar el hábito carmelita contra la voluntad de su padre, en 1535 huyó de su casa para dirigirse al convento de la Encarnación. Vistió el hábito al año siguiente, y en 1537 hizo su profesión. Comenzó una época de angustia y enfermedad, que se prolongaría hasta 1542. Durante estos años aprendió a confiar ilimitadamente en Dios y empezó a practicar el método de oración llamado «recogimiento», expuesto por Francisco de Osuna en su Tercer abecedario espiritual. Comenzó a instruir a un grupo de religiosas de la Encarnación en la vida de oración y a planear la reforma de la orden carmelitana para devolverle el antiguo rigor, mitigado en 1432 por Eugenio IV.

Su ideal de reforma de la orden se concretó en 1562 con la fundación del convento de San José y desde 1567 hasta su muerte, fundó la orden en Medina del Campo, Malagón, Valladolid, Toledo, Pastrana, Salamanca, Alba de Tormes, Segovia, Beas, Sevilla, Caravaca, Villanueva de la Jara, Palencia, Soria y Burgos. En 1568 se erigió en Duruelo el primer convento reformado masculino, gracias a la colaboración de San Juan de la Cruz y del padre Antonio de Heredia. Redactó las Constituciones (1563), que fueron aprobadas en 1565 por Pío IV, basándose en los siguientes puntos: vida de oración en la celda, ayuno y abstinencia de carne, renuncia de rentas y propiedades, comunales o particulares, y práctica del silencio.

Para ayudar a sus religiosas a la realización de su ideal de vida religiosa, compuso Camino de perfección (escrito entre 1562 y 1564 y publicado en 1583) y Las moradas o Castillo interior (1578). La reacción de los miembros de la antigua observancia carmelita llegó a su punto culminante en 1575, año en que denunciaron a los descalzos a la Inquisición. Un breve de Roma, en 1580, ordenó la separación de las dos órdenes.

En 1614 fue beatificada por el Papa Paulo V, y en 1622 fue canonizada por Gregorio XV. El 27 de Septiembre de 1970 fue proclamada doctora de la Iglesia, bajo el pontificado de Pablo VI, siendo la primera mujer que recibía esta distinción.